Resulta que el Canalla y la Linda se fueron por ahí y nos abandonaron, pero esta vez no dejaron al Cano en el sitio ése donde suelen, y nos dejaron a los dos en casa de la abuela y con el Leo. Menuda juerga nos pegamos. Bueno, al menos los dos primeros días, que al tercero es cuando vino la crisis.
Hacía un calor que pa qué. Aunque teníamos para nosotros toda una huerta para poder jugar a las carreras y a las peleas a lo bestia, ese día no había quien se metiera en el huerto de la pura calor. Y ahí estábamos los tres, juntitos, tumbados y con la lengua fuera axfisiaicos vivos. Parecía un concurso de lenguas fuera, y el Cano iba ganando, pero lo que se ganó fue otra cosa.
Pasaba por allí la abuela en ese momento, también muertecica de calor la pobre. Nos vió allí a los tres, tumbados junticos y con la lengua fuera, y según me contó después, pensó algo para aliviar tanta calor. Y no se le ocurrió otra cosa que coger un caldero con agua y tirárnoslo encima sin previo aviso y sin nada, así, a lo bestia.
El Cano, que estaba dormido vivo ni se enteró de la que le venía encima, y menudo remojón que se llevó mi hermano adoptivo. Pero lo peor fue el susto de muerte que se llevó el tío. Tenían que haberlo visto correr, más bien volar, hacia el huerto como alma que lleva el diablo.
Y allí se quedó dos días seguidos, sin atreverse a volver a entrar en el patio hasta que al fin volvieron el Canalla y la Linda. De vez en cuando asomaba un poco las orejotas y como quiera que allí viera a la abuela volvía sobre sus pasos asustado vivo, no fuera a querer tirarle encima otro chaparrón como el otro.
Lo peor es que el puñetero del Leo, que se supone que es mucho más que mi muy más mejor amiguito, pues es mi primo y todo, y nos conocemos desde que él era un cachorrín, se fue con el Cano al huerto, y allí estuvieron los dos todo el tiempo pasando de mí.
Yo me asusté, sí, pero lo del Cano fue tremendo. Hidrofobia canina se le llama a esto.
Nos pegamos unas juergas que pa qué, pero cuando llegó el remojón el Cano salió por patas
8 comentarios:
Hola Pelu,pobre hermano tuyo si es que un día de estos lo van a matar a sustazos! es que no veas lo poco que te esperas que te tiren un cubazo de agua cuando estas sobadito perdio...A mi mami lo que me hace es, remojar una toalla pequeñita y me la restrega por too el cuerpo (segun ella es para refrescarme, segun papi para incordiarme)..
Dale unos lametazos de mi parte al Cano para que se recupere pronto del susto!!
Manía con el refresco, conio.
Aquí la jefa, coge la manguera, y mira p'a otro lao. En cuanto estamos confiadas, ala, lluvia canto.
Que no termino yo de pillarle el truco a la maldita.
Jajaja,¡pobre Cano....!no me extraña que viera a la abuela y escapara,diria: ¡ésta me mata...!
Claro que tu lo cuentas,pero habria que ver lo que hiciste...
Guaubesos
Bon dia Pelu, con estos bipedos no ganamos para sustos, a mi en cuanto me descuido el jefe me da con una botellica que gasta pa regar las plantas, dice que para que este fresquito grrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr, humanos, que paciencia hay que tener con ellos xdddd
mfff, anda que, delicadeza pura la de la agüela, eh. no hay vídeo de cano mojado como un pollo y sobrevolando la huerta? es un pájaro, es un avión? no, es el cano acojonao!
Jué Pelu...pos vaya susto se pegó er pobre..pero fergquito quedasteis ¿no? y la legüita paentro der too jajajaja
espero no lan quedao secuelas y secongoje cuando vea un cardero jajaja
patita pa los dos con too cariño amigos
(¡Canoooo ques agua joé!)
yaya esa abuela joe
claro el pobre cano se asusto de lo lindo.
en fin, la abuela tuvo buenas intenciones proque con el calor que hace no me extraña--
no va a querer ver el agua mas
en fin..
patita a los dos
que susto dios.
La aguela esta ya como los papas, que cuando ellos tienen calor, nos andan echando agua con un vaporizador. Ala, que yo no se que gustito le pueden encontrar a eso.
Mejor que nos vuelvan a llevar al rio. Ahi si que esta fresquito.
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